La pérfida radical.
La vida sigue su camino, por más que me tropiezo una y otra
vez. Pero el destino ya está escrito, mi vida es un ejemplo de amores y
desamores. Nada de lo escrito es irreparable, pero la verdad del amor, es que
juega con tú alma, es ilusionista, mago, espejismo, es el que te hace creer.
Somos un juego al azar de la vida, si doblas hacia la izquierda o la derecha,
con lo que te topes será muy distinto.
En verdad, cuando te gustan las mujeres eres como un animal
descontrolado, sabes que te apasiona admirar su belleza, tú cabeza juega con
tus sentimientos y envenena tú sangre con fuertes dosis de amor descontrolado.
Nada que hacer, cuando ya fuiste infectado de amor, pasas a ser preso de las
ilusiones de tu mente. Crees que un demonio es un ángel y caes preso de la
ilusión.
Nunca sabrás ¿Qué tan buena es ella? Hasta que su diablo
interior se presente como realmente es. No fue hace mucho que mi querido amigo
sucumbió ante tan terrible destino, hoy un mercenario del amor, luego de haber
batallado contra la peor fiera, la pérfida radical.
Claro dirás que exagero, pero la sociedad ha creado un nuevo
infierno para nosotros, salen de las
cloacas del despecho, mujeres abandonadas a su suerte, que sienten un profundo
odio al macho alfa que las atrae, con escándalo promueven ideologías venenosas, que quieren destruir cualquier vestigio
humano que hay en ellas.
Es la pérfida radical, esa que cree que el hombre está aquí
como enemigo suyo, que ha fomentado su odio en escandalosas historias basadas
en mentiras, que sucumben ante su enredada teoría conspirativa del patriarcado,
olvidando por completo, como el hombre siempre ha estado ahí para protegerla,
que es el que pone el pecho ante el peligro, con tal de conseguir que ella
sobreviva un tiempo más. Nunca olvidar que siempre el hombre ante la
adversidad grita, las mujeres y los niños primero, para ser quien entregue su
vida a cambio de la seguridad de ellos.
Esta nueva perversión de mujer, es por lejos el trato más
humillante que un hombre con su hijo pueden recibir, en su afán de pensar que
son superiores, confinan a sus hijos a la ansiedad de tener a su padre cera,
son secuestrados y sometidos a fuertes adoctrinamientos de movimientos con ideologías
extremadamente funestas, que busca con un
afán maquiavélico destruir el amor entre padre a hijo.
Utilizan a nuestros pequeños
como herramienta de tortura, para someter al macho que ya no quiere nada con
ella, a un sinfín de abusos, todas basadas en no ver crecer a tu cachorro, destruyendo esos deseos de amor entre hijo y padre, crean un daño irreparable a nuestra
querida descendencia. Lo peor es cuando el macho despierta y se da cuenta que
la princesa se transformó en demonio.
Ha comenzado la tortura constante de la pérfida radical, ves
a tu hijo llorar en forma constante por él secuestro que sufre, te quieren
imponer lo que sea, te quiere denigrar, atropellar los derechos de tu hijo y lo
peor que buscan por todos los medios posibles para que te olvide de alguna manera, ese cachorro que tanto amas.
Es como si en las historias de Disney, estas quisieran ser
las villanas del cuento, ya que, ser la buena les crea rechazo.
Son demonios que
se retuercen en su maldad, ocupan el abuso sicológico a niveles inhumanos.
Esta vez mi amigo pagó caro su error, gracias a que no se preocupó de elegir bien a su compañera, hoy su hijo es raptado en
forma descarada por una pérfida radical, su camino será muy sinuoso, pero la
lucha la deberá dar igual, el problema será de ella, ya que, más temprano que
tarde se deberá enfrentar a su karma, que claramente deberá responder ante su
veneno perverso.
Comentarios
Publicar un comentario